“Impresionante. Sabía que no me iba a decepcionar esta compra a ciegas. Es un gourmand muy suave, en el sentido de que no empalaga ni huele a una canela sintética como es el caso de otras fragancias.
Abre con una mantequilla tibia, muy rica y efímera. Luego vienen la canela, el azúcar y la vainilla, que acaban secando en un bizcocho de lo más rico. Junto con Jazmín de Atenas, se ha vuelto mi favorito.
Estela y duración moderadas, pero tú lo percibes continuamente.”
“Un perfume muy realista, fue para regalo y le gustó muchísimo, a mi personalmente , no me encantó tanto, pero reconozco que su fragancia te hace la boca agua.”